Dentro del conocimiento que nos legaron los sabios ancestros Mayas para comprender las energías que conforman nuestra realidad, se encuentra la trecena y el cargador del año. Estas dos energías interactúan con el Ch’umil y número que rige cada día, aportándoles distintas cualidades y haciendo que la energía de cada día sea más completa y única.
La Trecena es una energía que forma parte del Calendario Sagrado, esta surge del Ch’umil que comanda y da inicio al grupo de 13 manifestaciones o números. Es decir, cada trecena comienza con el Ch’umil que es acompañado por la energía del número Jun (1), que es la p
rimera manifestación de cada uno de los Ch’umilab’: 1 B’atz’, 1 K’at, 1 No’j, 1 Tz’i’ y así sucesivamente hasta completar los 20 Ch’umilab’. Durante el año Cholq’ij hay 20 diferentes trecenas y cada una de estas influye sobre la energía de los Ch’umilab’ que componen esos 13 días. Por ejemplo, durante la trecena de B'atz', las energías de 2 E, 3 Aj, 4 I'x, 5 Tz'ikin, 6 Ajmaq, 7 No'j, 8 Tijax, 9 Kawoq, 10 Ajpu, 11 Imox, 12 Iq', y 13 Aq'ab'al serán influenciadas por la energía de B'atz'.
El Cargador del año es una energía que forma parte del calendario Haab’. En el primer día del año Haab', el día 0 Pop, se determina cuál será el cargador, por lo que el Ch'umil que rige ese día será también el que regirá sobre el año. Su energía será la encargada de cargar o sostener el tiempo durante los 365 días que dura el año Haab'. La energía del cargador también incide en cada una de las energías que se manifiestan en el Calendario Cholq'ij, y su poder nos fortalece y protege durante el periodo en que este rige. Durante este año gregoriano el tiempo será cargado por 9 Iq' hasta el 18 de febrero, y la energía del 10 Kej sostendrá el tiempo durante el resto del año. En este momento el tiempo está siendo cargado porl 11 E hasta el 19 de febrero. Luego, la energía del 12 No'j sostendrá el tiempo durante el resto del año.
Vemos entonces que las energías de cada día son profundas y complejas, pues estas son complementadas por otras energías como la de la trecena, el cargador del año e incluso las fases de la luna y otros eventos cósmicos. A medida que vayamos vibrando en sintonía con cada uno de los Ch’umilab’, prestando atención a cada día y a su interacción con las otras energías que están presentes, iremos teniendo una mayor comprensión del Cholq’ij y de como este nos influye personalmente. Veremos que es una gran herramienta para vivir en consonancia con la naturaleza y el universo y una guía que nos ayudará a alcanzar nuestro propósito de vida.
Denise Barrios
(Basado en los textos del Abuelo Carlos Barrios)
Comments